Un deseo

Una vez sentí que moría. Lo supe cuando al abrir los ojos secos vi mi cuerpo estirado en la cama y escuché una voz a mi lado...
-Soy tu peor pesadilla-me dijo-Soy el hombre del saco, soy el coco que te comera, soy lo desconocido, soy el fondo del mar.Pero tu puedes llamarme....Miedo.
Le mire asustada.
-Pero, me caes bien, sabes? Y por eso te daré lo que me pidas. Un deseo , si prefieres llamarlo así.
-Ya sabes, pídeme lo que quieras-me dijo.
No musité palabra.
-Pídeme lo que quieras-repitió-yo te lo daré.
Muy bien-contesté-Quiero...quiero soñar!
-Eso es todo? Solo quieres soñar?-preguntó.
-Así es.-respondí.
Miedo rió con una sonora carcajada.
-Todo tuyo-
Y mientras me adentraba en el mundo onírico le dije-Soñar lo es todo....Soñar es libertad. Soñar es poder. Soñar es y son tantas cosas....Soñar es...vivir!!!-

Y es ahora cuando pienso en lo que me sucedió que creo recordar haber oido un llanto desde lo más profundo de mi ser.

Pintor de Sueños

Si pudiera pintar los sueños...Esta sería mi paleta de colores.

THE SADMAN

Había una vez un niño.
Había una vez un llanto.
Había una vez un sentido.
Había una vez un milagro.

La rueda de la vida gira,
la rueda de la vida para.
No queremos saber.
Tenemos miedo a mirar

Y Destino se ríe de nosotros.

Cerramos los ojos con fuerza,
evitando ver la realidad.
Nos tapamos los oidos,
sin querer oir la verdad.

Y nos encontramos a oscuras
en un callejón sin salida,
con una puerta pequeña
con una puerta entreabierta.

Y Muerte nos sopla en el cuello.

Tiramos pa'lante.
No hay opción. No hay salida.

Algo se mueve en mi interior.
Me duele la cabeza.
No queremos pensar.
todo va bien, para qué parar?

Y Sueño nos guiña un ojo.
Y Sueño nos despierta.
Y Sueño nos sonríe.

_Bienvenido a a mi mundo- Dice.

Y Sueño susurra- Vigila con lo que sueñas, puede hacerse realidad.

Y Destino se ríe.
Y Muerte se ríe.
Y Sueño...
Sueño sonríe.

Intentos

Me siento en una silla ante una hoja en blanco. Es una enorme hoja, casi gigantesca. La miro con cierta timidez y casi la venero. Ella me devuelve la mirada llena de arrogancia.
Cojo un boligrafo con la mano temblorosa y sudorosa, y poco a poco la acerco a esa página blanca que cada vez es más grande y más altiva.
Primer intento.
Mi mano suelta el bolígrafo a pesar de que ansio escribir. El bolígrafo azul esta helado, frio, inherte.
Segundo intento
No me doy por vencida. De nuevo ataco; y como si de dos imanes del mismo polo se tratasen, hoja y boligrafo se repelen.
Tercer intento.
Agarro el bolígrafo con todas mis fuerzas, como si me fuera la vida en ello (bien, de alguna manera así es)
La hoja hace una finta y me dedica una sonora carcajada.
Cuarto intento.
Como buen guerrero que se aprecie, yo no me rindo.Cada vez estoy más convencida de que soy capaz de hacerlo. Vaya, eso creo.
Decido darme un respiro.
Voy a la Transtienda para comprobar que esta lucha es por uno de mis Sueños.
Abro cajas y cajas, reviso estantes y estanterías. ¡Y allí está! Escondido, cubierto de polvo, consumido por el tiempo. Su aspecto esta muy desmejorado y al principio me ha costado reconocerlo.
Necesita tiempo. Necesita acostumbrarse de nuevo a la luz. Lo cojo con dulzura, y hasta que no lo tengo entre mis brazos no me doy cuenta de cuanto lo había echado de menos.
Quinto intento.
Cojo de nuevo el bolígrafo; ya no está tan frío. Lo acerco a la hoja con seguridad y templanza. Apoyo la punta azul en la hoja mientras esta parece estremecerse.
Ya casi lo tengo. La hoja ya no parece tan grande.
Y como aquel que aprende a ir en bicicleta y nunca más lo olvida.....yo vuelvo a escribir.